EL RATÓN
 
								
				
				EL RATÓN
Viendo al pobre ratón,
me dan ganas de
darle un quesón.
Está corriendo todo el tiempo,
y le pongo un cuenco
hasta que acabe de beberlo.
 
       
		
		
	 
								
				
				EL RATÓN
Viendo al pobre ratón,
me dan ganas de
darle un quesón.
Está corriendo todo el tiempo,
y le pongo un cuenco
hasta que acabe de beberlo.
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